LA CAMPAÑA DEL NOESCIERTO

Gabriel

El 3 de Junio son las elecciones para Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; y en el mes de Octubre, las presidenciales y algunas para gobernador, intendentes, senadores, diputados y concejales. Mis estimados lectores, mal que nos pese, estamos en campaña. Los que vivimos por estas costas, ya venimos padeciendo el avioncito con la propaganda de Sobisch, los parasoles y las cartas de truco de Francisco de Narváez, los volantes del marido de la Bolocco prometiendo el 1 a 1 (Creo que se refería a un partido entre Racing e Independiente), nos bancamos a Macri en la Playa Bristol jugando a las cabezas con los ídem de ahí (Era un chiste), hemos soportado a Scioli en cuanto acto hubiera que dar una mano y a Lavagna riéndose (Les juro que lo vi con mis propios ojos), y más recientemente vino el amigo Néstor a inaugurar un cantero con dos flores, un centro de la visión y un chiringuito de jugos y licuados en Punta Mogotes.
Es así amigos, comienza una época dura donde deberemos soportar las mentiras de todo candidato que le pongan un micrófono y una cámara adelante, con su consecuente repetición en todos los canales, radios, diarios y revistas. Y eso no es nada, también nos tendremos que bancar los ataques de candidato a candidato, las denuncias cruzadas, las críticas de unos a otros, con su posterior respuesta “No es cierto”. Comenzó la Campaña del Noescierto, todos niegan las críticas que se les hacen, se apartan de quienes alguna vez los acompañaron, desconocen su pasado o lo justifican con cuentos inverosímiles. Ninguno dice, cambié de bando porque pienso distinto, me gusta más esto que aquello, antes estaba equivocado o cosas por el estilo. Y como en la Campaña del Desierto, nuevamente Roca es el malo de película. Sí, se murió, pero es el protagonista porque habrá miles de billetes de $ 100 con la cara del susodicho dando vueltas por todos lados queriendo captar nuestras voluntades electorales, sea mediante propaganda (Acá está bien el término, no?), mediante clientelismo, planes sociales, compra de votos, y todas esas cosas que se pondrán en práctica por primera vez en estas elecciones.
Mentía Sarmiento cuando escribía “Bárbaros, las ideas no se matan” porque acá se murieron, o se gastaron o no se que pasó pero a ninguno de los candidatos se le cae una idea como la gente, todas son refritos de ideas ya probadas con suerte dispar. Lamentablemente no me pude expedir con anterioridad sobre este tema, si no les recomendaba que a fin de evitar el padecimiento de soportar las campañas entraran a la Casa de Gran Hermano... por lo menos por un tiempito zafaban y quizás hasta se ganaban unos mangos.

DIME COMO TE LLAMAS

Por Gonza

Como siempre sumido en problemas muy importantes, hoy me puse a pensar en los nombres de los comercios, lo cual es valido, porque aunque sea en pavadas, por lo menos pienso un rato, que no me viene nada mal, en este estío desolador.
Con tanto avance del marketing, el managment y tanto adelanto científico, se ve que la onda todavía no le ha llegado al pequeño comerciante.
El comerciante a la hora de inaugurar su negocio debe pensar en muchas cosas, pero se ve que el nombre del comercio queda en el último lugar.
Siempre se repiten las mismas pocas variantes y alguna que otra que se pone como “de moda”. Vayamos a los ejemplos:
LA ESQUINA: Si el negocio queda en una esquina el nombre es de cajón. “La esquina del tornillo”, “La esquina del calzado”, en dos palabras, “la esquina”.
LA CASA: Otra variante que tiene la ventaja que menciona el rubro comercial pertinente es esta “La casa de…” el cuero, el anteojo, la tuerca, etc.
Hay nombres comerciales que tienen localia, este es un estudio de nombres comerciales serio ¿eh? No jodamos.
Por ejemplo:
DEL MAR: Si el negocio es en Mar del Plata, se va a llamar seguramente “(Lo que sea) del mar”. Entonces tenemos, “Video del mar”, “Restaurant del mar” o “Café del mar”. O en su defecto, “Videomar”, “Restòmar”, o “Cafémar”.
DEL MILAGRO: Ahora, si el negocio es en la ciudad de Salta, como son devotos de la Virgen del Milagro, va a llamarse seguramente “Del Milagro” entonces tenemos:
“FM del Milagro”, “Panadería del Milagro”, “Almacén del milagro” y todo es del milagro y estos ejemplos en particular existen todos, aunque Ud. no lo crea.
2000: Hay otros nombres que son ocasionales. Si el comercio fue inaugurado en el año 2000 se va a llamar seguramente: “2000”. Entonces tenemos, “Supermercado 2000”, “Panadería 2000”, cualquier cosa 2000. O en su defecto “Millenium”.
MUNDIAL: Si el comercio fue inaugurado en ocasión de disputarse la máxima justa del fútbol mundial, pues entonces es la oportunidad para bautizarlo “Mundial” o “del Mundial”.
NEOLOGISMOS: Como accesorios al nombre hay que ponerle una palabra medio rara, por ejemplo no se puede poner “Del Mundial, café” todo negocio cafetero que se precie debe decir a manera de subtitulo, caffe con dos letras “f” que no es en italiano ni en ningún idioma, pero no importa.Y para promocionar plottear toda la vidriera con palabras inentendibles como OUTLET, ON SALE , OFF, etc.
También se le puede poner “Resto bar”, así, como contra flor al resto, que no se sabe bien que quiere decir, pero queda bien.
NOMBRES ABREVIADOS: Hubo también una onda de abreviación de nombres, y así tenemos, que el supermercado “El Alcázar de Toledo” paso a llamarse simplemente y escuetamente “Toledo” y el Banco de Galicia y Buenos Aires, paso a llamarse solamente “Banco Galicia”, entre otros ejemplos. “La Banca Nazionale del Lavoro”, nombre extranjero y largo, no fue modificado, sino que directamente cerraron, se ve que no se pusieron de acuerdo respecto a este tema y se vieron obligados a cesar en la actividad comercial. Pero… ¿Quién tomo la posta? El Banco de Londres, que post 1982 y por razones obvias tuvo que cambiar de nombre y tiene ahora un nombre rarísimo que es una sigla que no se que quiere decir, HSBC, y que en ingles se pronuncia chi, chi, chi, chi.
NOMBRES ALARGADOS: Otros nombres actualmente se han alargado, seguramente por protesta de los letristas, fileteros y fabricantes de carteles y afines, quienes vieron perjudicada su fuente de trabajo con la onda de abreviación ya descripta. Será por eso que a paso lento pero firme se fue imponiendo la onda de alargamiento nominativo y así hoy tenemos “Como quieres que te quiera”, “Los calzones de mi abuela” y el que vi hoy en la esquina de Belgrano e Hipólito Irigoyen, que es un café con un nombre mas largo que esperanza de pobre, "la poesia nella citta". Tomà mate. (O café en este caso).

The Police

Es común leer o escuchar en reportajes a músicos –sobre todo a los hoy cincuentones- que éstos cuenten cómo escuchar a los Beatles les cambió la vida, cómo descubrieron una música nueva gracias a ellos. Sin ser músico, algo similar me pasó a mi cuando a los 14 o 15 años escuché el primer disco de The Police. Me partió la cabeza, me pareció algo muy original que no se parecía a nada de lo escuchado anteriormente. Al poco tiempo vinieron a Mar del Plata y por esas pendejadas de la vida (una fiesta o algo así en la misma fecha) no fui, algo de lo que me arrepiento hasta hoy. Era 1980 y los pibes estaban en su mejor momento, con dos discos excelentes editados y presentando el 3º.- Ahora se reunieron y por ahí vienen este año. No creo que bajen a MDP, pero si vienen pagaré mi deuda personal e iré a Buenos Aires a verlos. Ya no somos los mismos y ni en pedo es su mejor momento, pero algo es algo.- Les dejo un videito de la única vez que se juntaron en estos años, para la gira de Amnesty 1986, “Invisible Sun” Mariano

PANFLETOS

Por Gonza

No me gustan los panfletos que reparten por la calle. Me parece un medio de comunicación rudimentario, que termina ensuciando la ciudad y la mayoría de las veces no me interesa lo que publicitan.
Tanto es así que más de una vez me abstengo de tomar el papel que me ofrecen. Rechazo los panfletos, no los quiero, no quiero tirarlos en la calle y se me transforma en un problema ¿Dónde me meto ahora este panfleto?
Pero salvo los necios, todos cambiamos.
El otro día estaba viendo al actor Coco Silly en un reportaje que le hicieron por televisión y el contaba que no hace tanto panfleteaba en la calle Corrientes de Buenos Aires sus obras de teatro.
Tenia que repartir miles de panfletos pero nadie se los agarraba, lo esquivaban, lo eludían, se le hacia muy engorroso.
Ahí me sentí un ingrato, un egoísta, un ser antisocial “yo hago exactamente eso”.
Entonces ahora panfleto que veo, panfleto que agarro. Y si voy en el auto bajo la ventanilla, haga frío, haga calor o llueva. Después los tiro, pero el panfleto venga. Ahí esta la foto con todos los que juntè.

O' CLOCK

Gabriel

Estoy hastiado de los impuntuales, no los soporto, ni a ellos ni a sus excusas miserables. Basta!!!! Es muy difícil ser puntual en las épocas que corren, ya no se puede llegar temprano a ningún lado porque te comés unos emboles bárbaros y encima tenés que soportar las excusas más infantiles que hayas escuchado, como se me rompió el auto, había un tráfico bárbaro y estás en Villa Gobernador Gálvez, me paró la cana y me hicieron el test del alcoholemia, etc. etc.. Y nada de esperar cinco minutitos, te tenés que bancar un plantón de media hora como poco.
Reconozco que soy un poco molesto con el tema de la puntualidad, pero una cosa es demorarse y otra tomarse todo el tiempo del mundo para prepararse para salir y llegar a un lugar, sin siquiera merituar el tiempo que le hacés perder a los demás. Y esto se da en todos los órdenes de la vida.
En el trabajo todos llegan tarde, las reuniones empiezan media hora después de la estipulada, los clientes llegan 45 minutos tarde al turno que les diste, te pagan dos o tres meses después que la fecha en que te tenían que pagar, te traen las cosas después de una semana, entre otras cuestiones similares.
Si vas al médico, te atiende una horita y media después de tu turno, y te tiene todo ese tiempo leyendo las revistas nuevas del mundo del espectáculo, como la Gente que tiene a Adriana Brodsky en la tapa, la Siete Días con foto central de Silvana Suárez o el Gráfico con nota exclusiva al Pato Fillol y Passarella juntos antes del Mundial 78.
Si organizás algo en tu casa, tenés que empezar a subir y bajar la parrilla aguantando el asado hasta que lleguen los comensales, y guarda con que se te pase una costilla, porque te comés la gastada del año.
Si salís con un amigo, seguro que justo es el metrosexual del grupo, y lo tenés que esperar hasta que le combine toda la ropa que lleva puesta, y le haga efecto el gel que se puso en el pelo, cuando no se hizo la carmela y empieza a intentar que no se le vean las dos canas que le quedaron.
Ahora si salís con una mina, agarrate, porque si la tenés que pasar a buscar te clavas una horita esperando abajo o en la puerta mientras se termina de probar la ropa, se cambia, se maquilla, se perfuma, se vuelve a cambiar, se saca un poco de maquillaje porque cree que queda muy atorranta, se vuelve a cambiar de ropa, le da de comer al perro y tira toda la ropa adentro del placard por las dudas vuelva con vos a tomar el famoso café. O bien puede pasar que te ensartes la misma cantidad de tiempo esperando adentro de la casa, pero siendo cuidadosamente estudiado e interrogado por los viejos, hermanos/as, abuelos/as, sobre aspectos personales, familiares, laborales y económicos. Y ni hablar de la espera compartida con mascotas que te empiezan a oler y a merodear como si supieran que lo único que querés es darle a su dueña de manera inmediata.
En fin, esperar a los impuntuales me pone loco, no creo poder acostumbrarme.

Gabriel
Ante la sugerencia de mi amigo Pato decidí prestar atención a la actitud de la gente que en plena temporada, toma por asalto las peatonales de Mar del Plata y hace de ellas su lugar de rélax. Te encontrás con todo tipo de especímenes, viejos, pibes, minas lindas, feas, chetos, garcas, vagos, borrachos, mangueros, laburantes, artistas callejeros, repartidores de volantes, vendedores ambulantes, encuestadores, gente autodenominada común, etc., etc.. Si prestamos atención, veremos que mucha gente está ahí sin saber qué hace ni adónde va, por horas, y tampoco le preocupa mucho.

Para ejemplificar trataré de describir una caminata de un matrimonio de treinta y cinco o cuarenta años de casados.

Comienzan en la primera cuadra mirando locales que venden remeras rockers y los adornitos de los lobos que cambian de color indicando el estado del clima. Cuando llegan a la esquina, los agarran unas promotoras de tiempo compartido y con la excusa de que se pueden ganar un viaje los tienen cuarenta y cinco minutos contándoles los beneficios que tiene este tipo de inversión, y si los enganchan flojitos los llevan a una reunión donde intentarán venderles el paquete a toda costa.

Después siguen por la segunda cuadra y se ponen a ver al tipo que imita a Gardel, que fue el que me hizo entender por qué a Carlitos le decían el mudo. Salen de ahí, ya con cuarenta volantes en la mano promocionando diversas cosas, y empieza el show de los que venden unos implementos bucales que hacen un ruido similar a los maullidos de los gatos en una orgía. Seguramente compren uno para su nieto, que nunca funcionará o al menos no tan bien como el del vendedor. Siguen caminando entran a alguna galería, miran un par de vidrieras y no pueden dejar de detenerse a ver al de los rompecabezas de alambre, quien los engancha desarmándolo en tres segundos y los pone a intentar con uno durante veinte minutos por lo menos, mientras miran de reojo a la mujer-estatua que está al lado.

Una vez que terminaron con eso, y totalmente decepcionados por su incapacidad, se sientan a tomar un café, en el lugar más choto de la peatonal. Cada café $ 6 por poner cara de turista y no pedir la carta. Al retomar la caminata, y fortalecidos por el reparador café, se disponen a ver al hombre sin piernas que toca la guitarra y canta como yo. Muy mal. Hasta ahí vienen dejando entre uno y cinco mangos por parada, pero esto no los amilana. Siguen con sus caras de turista fascinado con los espectáculos públicos que pueden disfrutar "sin poner un mango", mientras compran un almanaque de bolsillo de 1997 a cincuenta centavos, una bicoca.

En la cuadra siguiente, se pone bueno. Un tipo pinta murales con aerosol y sus dedos, y al lado uno hace retratos y caricaturas como si fuera Ordoñez el de Finalísima del Humor. Imperdible. Bah, imperdible es la cara del pibe que se la hicieron, cuando se da cuenta que no se parece ni un poco al que está en el papel. Pero, como es verano todo vale y la señora decide hacerse uno por la módica suma de $ 30. Otra horita ahí, señora sentada y marido parado al lado del falso Ordoñez poniendo cara de "…qué hijo de p… le sale igual…". Para todo esto, ya te cruzaron diez brujitas y/o rollingas que te manguearon un pesito p´al bondi, el sanguche, o la birra.

Las últimas cuadras ya se caminan más rápido porque hay hambre, cansancio, y los shows se repiten, más estatuas, más mimos, más Sabinas, Gardeles y Cachos Castaña, más payasos, malabaristas, mangueros, pintores y caricaturistas. Qué linda la peatonal, qué de cosas que hay para hacer sin gastar un mango!!!!!!.

Los Cadillacs en La Noticia Rebelde

Mientras se nos ocurren ideas para postear, les dejo este video. El reportaje no es gran cosa, pero vale como recuerdo del programa que influenció a toda la TV actual y de un Vicentico flaco.- Mariano